Mezclan "deuda bancaria" y "deuda por guerra"

publicado el 12 de julio de 2015 en «Milenio Diario»
columna: «se descubrió que...»

 

Cuando pido un préstamo bancario recibo una cantidad numerable, un plazo para pagar y un interés. Cuando firmo mi derrota en una guerra, los triunfadores ponen los números que se les pegue la gana: ¿Cuánto cuesta una capilla gótica del siglo XII destruida en Londres por cohetes V-2 alemanes? ¿Cuánto cuestan los franceses acribillados en Francia ocupada? Y los belgas, holandeses, polacos, rusos.

Mi veneración por el despertar de la ciencia y el humanismo en la Grecia clásica no me ciega para no ver que, la ahora traída y llevada quita del 50% de la deuda alemana en 1953, firmada entre otras naciones por Grecia, es una deuda calculada por daños y perjuicios, no un préstamo exacto.

¿Cuánto cuestan Dresde, Berlín, Hiroshima, Nagasaki? No sólo sus construcciones, evaluables o invaluables cuando son joyas de la arquitectura, sino las vidas: los niños y no combatientes ingleses aplastados al bombardear su refugio antiaéreo en Londres. Cuestan lo que Inglaterra diga. Pero, ¿se pueden pagar con las vidas de niños alemanes destruidas por la RAF en las ciudades alemanas bombardeadas sin que fueran objetivos militares? No. Y no los descontaron los Aliados.

El dominio del griego moderno y clásico no dan acceso a la Lógica de Aristóteles porque gente, tan filhelena como yo, pide una quita a Grecia porque Grecia y Aliados la firmaron con Alemania. Falacia ciega: ni cobra Alemania a Grecia, sino la Unión Europea, con países más pobres que Grecia, como Eslovaquia o Letonia (que deberán perder el capital prestado), ni ven el claro sofisma de equiparar préstamos: números, contra perjuicios invaluables. En un puente de Hiroshima quedaron las siluetas de varios niños vaporizados por la bomba del 6 de agosto por la mañana: ¿cuánto debe pagar EEUU por esas vidas? La sola pregunta es absurda.

La quita de deuda alemana en 1953 tuvo, además, una clara elección del mal menor: Europa se iba al bando soviético en masa, incluida media Alemania. Los Aliados recordaron 1918: al final de la Gran Guerra, los Tratados de Versalles impuestos contra los imperios alemán y austrohúngaro fueron tan leoninos que para 1924 la hiperinflación alemana tenía circulando un billete por un millón de millones de marcos... que no valía ni el papel. Y, atención, eso produjo el ascenso como espuma de Hitler.

Tras la II Guerra entró Grecia en una guerra civil pro comunista. Sus vecinas Albania, Bulgaria y Macedonia ya eran satélites de la Unión Soviética. El Plan Marshall de EU se propuso levantar los restos de Europa para evitar que toda cayera en manos soviéticas.

Es muy inquietante que Alexis Tsipras, joven comunista, sea primer ministro de Grecia por la alianza contranatura con un partido, Anel, de derechas, fundado por un miembro de Nea Dimokratía: derecha. Ni que el triunfo del No en el referéndum (por el que yo habría votado de ser residente griego) haya sido tan festejado en Atenas como en París... por la ultra derecha fascista de Le Pen.

Sócrates nos enseñó a encontrar los sofismas en las argumentaciones, las falacias diríamos ahora. Y una, grande como la catedral de Colonia no derrumbada por la aviación de los Aliados gracias al pueblo alemán que la rellenó de costales de arena, es que el pueblo griego ya pagó con sufrimiento... Pero, si lo desdeña, la UE lanza a Tsipras en brazos de Putín con quien ya se ha entrevistado entre grandes sonrisas mutuas. No creo que Tsipras tenga un centésimo del colmillo ruso.

Tsipras sabe que ha llevado la tensión a su máximo: el ministro que llamó “terrorista” la exigencia de pagar los préstamos ya se fue, el nuevo proyecto de reformas presentado a Bruselas incluye todo lo que el referéndum del No rechazó.

Es natural que recordemos la deuda del mundo con la Grecia clásica, o me lo pareció a mí porque hice breve recuento el domingo pasado; pero mis recontra-abuelos modificaron genéticamente el trigo hace 14 mil años en Oriente Medio: ¿le cobraré derechos a Bimbo? Como chiste tampoco es bueno. Los griegos se portan como niños chiquiados. Culpa nuestra. De todos.

 

la talacha fue realizada por: eltemibledani

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