En el afán de los Estados Unidos por liberarse de su dependencia del petróleo, también las bacterias han sido puestas a trabajar. La energía obtenida por biomasa (materia orgánica renovable) ya es un hecho. Pero hay algo todavía más espectacular: Investigadores de la Penn State University y de Ion Power, Inc. anuncian en línea que han conseguido embridar los esfuerzos de miles de millones de bacterias en un sistema de ingeniería por bio-filtrado que produce hidrógeno al purificar aguas negras. Este gas, cuya potencia explosiva fue bien conocida por los primeros constructores de globos y dirigibles, es un perfecto combustible para muchos tipos de máquinas. El nuevo sistema es más de dos veces más eficiente en producir hidrógeno que otros sistemas similares de bio-filtrado. El nuevo aparato tiene el beneficio añadido de ser capaz de digerir desechos humanos o animales, material vegetal o cualquier otra materia orgánica.

El anuncio fue hecho por Hong Liu y Bruce Logan de la Penn State y Stephen Grot de Ion Power, Inc. en la revista Environmental Science and Technology. Está disponible.

La soya combate el cáncer de próstata

Una de las metas en la terapia del cáncer de próstata es reducir la cantidad de hormonas masculinas, en particular testosterona. Hay medicamentos que bloquean los receptores o bloquean la producción. Se llega en ocasiones a eliminar de forma quirúrgica los productores principales de la hormona: los testículos.

Un equipo de científicos ha descubierto que una casi desconocida molécula, creada en el intestino al digerir la soya, es un bloqueador natural y poderoso de la hormona masculina que es causa de la calvicie de patrón masculino (las entradas de la frente y la coronilla de fraile) y parte activa en el cáncer de próstata. De hecho, la molécula, conocida como equol, detiene por completo en sus rutas la hormona masculina dihidrotestosterona (DHT), que normalmente estimula el crecimiento de la próstata y causa el patrón masculino de calvicie.

"Esta molécula es notable", dice Kenneth Setchell, director de espectrometría clínica de masa en el Cincinnati Children’s Hospital Medical Center, que fue quien primero identificó la molécula equol, hace 20 años. "Estos hallazgos son de inmensa importancia clínica porque bloquear la acción del potente andrógeno DHT ha sido el santo grial de la industria farmacéutica como estrategia para tratar el cáncer de próstata y otras enfermedades relacionadas. Este metabolito natural, que se encuentra en las semillas de soya, lo hace muy efectivamente".

El estudio, que probó la respuesta del equol en ratas, fue conducido en la Universidad Colorado State, la Universidad Brigham Young y el Children¹s Hospital de Cincinnati. Apareció en la edición de abril de Biology of Reproduction. Para mayor información, contacte a Jim Feuer.

La cebolla combate la osteoposis

Además de dar sabor a la comida, las cebollas también son buenas para nuestros huesos. Investigadores de la Universidad de Berna, en Suiza, han identificado un compuesto en ese conocido vegetal que parece disminuir la pérdida de hueso en estudios de laboratorio. Al menos, ha sido eficaz en células de hueso tomadas de ratas. Aunque son necesarios más estudios, el actual sugiere que comer cebolla puede prevenir la pérdida de hueso y la osteoporosis, una enfermedad que afecta principalmente a mujeres mayores. La enfermedad produce un aproximado de 17 mil millones de dólares en costos médicos, sólo en los Estados Unidos.

El estudio, programado para el número del 4 de mayo del Journal of Agricultural and Food Chemistry, órgano de la American Chemical Society, ya está en su sitio de la red.

Suponen los investigadores suizos que el responsable de ese efecto saludable en los huesos es un péptido llamado GPCS. El tratamiento con ese compuesto inhibió significativamente la pérdida de minerales en los huesos, incluido calcio, comparado con células que no recibieron GPCS. Faltaría por saber si el efecto también se produce en humanos... y cuánta cebolla se necesita para obtener ese positivo efecto en la salud de los huesos. También debe determinarse el mecanismo de acción del GPCS sobre los huesos, aún desconocido.

Mayo ha sido declarado mes nacional de la vigilancia y la prevención de la osteoporosis por la National Osteoporosis Foundation.

la talacha fue realizada por: eltemibledani