En la zona de influencia del EZLN y ahora en Atenco, Estado de México, encontramos municipios que se declaran autónomos. Nada nuevo añaden, porque nuestra Constitución Política, en su artículo 115, señala textualmente: "Los Estados adoptarán, para su régimen interior, la forma de gobierno republicano, representativo, popular, teniendo como base de su división territorial y de su organización política y administrativa, el Municipio Libre..."

La definición de Municipio Libre es mucho más amplia que la de autonomía, localizada únicamente en el artículo 3o, que trata de las universidades que "tendrán la facultad y la responsabilidad de gobernarse a sí mismas". Esto significa que un municipio tiene autonomía, porque se gobierna a sí mismo, pero además muchas otras libertades que rebasan la simple autonomía; una institución simplemente autónoma es menos libre que un municipio.

Los municipios no sólo tienen a su cargo los servicios públicos (inciso III), están además facultados para participar en la creación y administración de sus reservas territoriales, aprobar y administrar sus planes de desarrollo urbano, controlar y vigilar la utilización del suelo, intervenir en la tenencia de la tierra urbana y en la creación y administración de reservas ecológicas (inciso V). Están investidos de personalidad jurídica (inciso II), se administran por un ayuntamiento de elección popular (inciso I). Nada de esto era real cuando el PRI dictaba quién era el siguiente alcalde, así como ungía presidentes de la República y gobernadores. Pero la más grande revolución del México presente es la recuperación de las elecciones por los ciudadanos: ya nadie pone en duda que el sufragio es efectivo y no sólo lema para terminar documentos oficiales.Si por municipio autónomo se entiende el que levanta una cortina de retenes para impedir la entrada de maestros, médicos, material de construcción y otros bienes y servicios que se deben proporcionar desde el exterior porque el municipio no los produce, la única dañada será la población, salvo que se trate de Tlalnepantla o Monterrey, llenas de industrias, de Coatzacoalcos, lleno de petróleo, o de Acapulco y Cancún, llenos de turismo, pues ningún otro municipio, con habitantes en su sano juicio, puede prescindir de los fondos estatales y federales que distribuyen la riqueza nacional, de manera poco equitativa, por cierto; pero en ese caso, se trata de que el municipio exija más fondos y no que se declare autosuficiente y "autónomo".

En los municipios que se han autonombrado "autónomos", sin ver que eso les restringe y no les aumenta sus libertades, lo cierto es que esa prestigiosa palabra sólo ha sido el nombre con que se ha desconocido a las autoridades elegidas por voto universal y directo, para implantar autoridades de facto. El método es el de todos los tiranos que en el mundo han sido, desde Pinochet y Fidel Castro hasta los líderes de Atenco. Si el problema es con autoridades que no dieron el ancho en algún conflicto, hay métodos legales para desconocerlas y llamar nuevamente a elecciones. Pero el voto universal, secreto y directo es enemigo de estos micro santa annas, siempre dispuestos a "sacrificarse por el pueblo".

¿Quién impide en Chiapas y Atenco el ejercicio del voto? Los líderes encaramados en la ola de la revuelta. Así ha sido siempre, así fue durante todo el siglo XIX y por ellos, no por Estados Unidos, perdimos la mitad del territorio, y el nivel de vida de la población se tardó 100 años en alcanzar el que tuvimos al final del virreinato.

Y allí están ya otra vez: cada uno con su "plan", con su pequeña revuelta para entronizar a un nuevo cacique, ardiendo en deseos de que las cosas estén peores para que se den las "condiciones objetivas para la Revolución", la de la R mayúscula.

Cada siglo hacemos lo mismo: apenas se estaba recuperando México de la rebatiña entre los "héroes que nos dieron patria", cuando ya teníamos a Zapata levantado en armas ¡a los 20 días de las elecciones! contra el presidente Madero, recién elegido por mayoría abrumadora en elecciones intachables. Y así empezaron otros diez años de destrucción, hambre y pobreza. Los únicos beneficiarios fueron los nuevos caciques emergidos de la Revolución; si alguien lo duda, vea los apellidos en las secciones de sociales y la pobreza en el campo morelense, donde hasta un campo de golf se impidió construir y allí sigue el pedregal yermo, bueno para los alacranes y las lagartijas, mientras la población emigra a morir en Estados Unidos, unos ahogados en el río Bravo, otros de sed en el desierto.

Aquí vamos: nuevo siglo, nueva revolución, nuevos caciques salvadores del pueblo, nuevo patriotismo para rechazar capitales extranjeros e imponer la voluntad del más fuerte del momento.

El concepto mismo de municipio, autónomo o libre, es español, y antes que español, romano. El comentario del constitucionalista Carlos Francisco Quintana al artículo 115 señala: "Fue el derecho público romano el creador de esta institución, que llega más tarde a nuestro continente por la influencia española de la conquista, matizada con algunas instituciones de origen germano, particularmente visigodas..."

Continúa más adelante Quintana: "En la Nueva España los ayuntamientos fueron prácticamente la única representación del pueblo, sobre todo con los llamados alcaldes ordinarios, que se conservaron siempre de elección popular..."

Ya imagino que a Moctezuma II, a quien no se le podía ver a los ojos ni darle la espalda, le anduvieran declarando "municipios autónomos" y mucho menos libres, como los definidos por la constitución liberal de 1857 y la revolucionaria de 1917. Las redivivas aspiraciones caciquiles han encontrado una palabra mágica, autonomía, para esconder su falta de elecciones democráticas, con voto universal y secreto, mujeres incluidas.

Tres pies al gato

Sostiene con razón Jaime Sánchez Susarrey este sábado: "México no puede suspender la producción de petróleo en vísperas de un conflicto en Irak. Para Estados Unidos, el petróleo mexicano es mucho más que un asunto económico, es una cuestión de estrategia militar y seguridad nacional." ¿Se está buscando la intervención militar de Estados Unidos en caso de guerra en Irak y huelga en México? Y todo por una petición de desafuero contra líderes-diputados del sindicato petrolero que debió esperar, sin duda alguna, a la solución del conflicto laboral.

la talacha fue realizada por: eltemibledani