Ayer lunes 12 la zona conurbada de Guadalajara amaneció sin transporte público. En el estado de Jalisco hubo paros. Los choferes demandan 1.60 por boleto vendido: aumento en la peor dirección, pues incita al arrebato de pasaje y a correr a costa de la vida de usuarios, más de 40 muertos este año. Les pagan por correr y por eso matan. Deben tener salario fijo y justo.

En el mundo entero el transporte público es de propiedad pública. Y en todo el mundo su costo está parcialmente subsidiado. Es así porque se trata del subsidio más eficaz si tomamos en cuenta que lo reciben los más necesitados y que, sin transporte público no hay industria, comercio, servicios de salud y de gobierno ni actividad económica alguna.

El transporte público es, como el drenaje, la pavimentación, la iluminación nocturna, una tarea que no puede sujetarse a criterios de mayor lucro. Es tarea que solo desde el gobierno se puede planificar. Los costos deben ser de recuperación y no de utilidad. Eso no pueden aceptarlo quienes se han hecho de flotillas desde su paso por puestos públicos. Únicamente el gobierno municipal puede ordenar rutas, establecer horarios entre terminales, multar al chofer que llegue antes, señal indudable de que corrió y arrebató pasaje, y no al que llega después por su paciencia con usuarios lentos.

Pero esa medida está a cargo del Congreso del estado. Y es allí donde se concentran los intereses de flotilleros.

Contra la ampliación del escaso transporte de propiedad pública, juegan no sólo intereses de quienes han empleado sus cargos públicos para concesionarse flotillas de autobuses, y de taxis, sino la legislación mexicana que sólo da tres años, sin reelección inmediata, a los alcaldes: nada importante se puede hacer en tres años.

Hay soluciones técnicas para crear un sistema de Metro: una es perforar con un escudo rotatorio sin abrir vialidades, se ha usado en el DF; otra es hacer sistemas elevados. Pero todo se ha ido en arrebatos de campaña, como el de construir un tren de suspensión magnética... ¿para detenerlo cada 200 metros? Un disparate que no volvió a mencionar su autor.

La envidiable eficacia en los gobiernos del DF es en buena medida producto de los seis años que dura el jefe de Gobierno: puede estar seguro de iniciar e inaugurar una obra costosa y lucidora: otra razón más para la reelección consecutiva de alcaldes.

la talacha fue realizada por: eltemibledani