El ruido y el chicharrón

publicado el 17 de marzo de 2003 en «Milenio Diario»
columna: «la calle»

 

Que le estamos buscando ruido al chicharrón al no acatar lo que el presidente Bush ordene, cuando, donde y como quiera: eso es seguro. Que debemos atenernos a los principios de nuestra política exterior: ya no es tan seguro porque de principios y de buenas intenciones está empedrado el camino del infierno.

Dos lunes consecutivos, 3 y 10 de marzo, Max Weber (Maks Vebber) le dirigió sus reflexiones sobre la ética absoluta y la ética de la responsabilidad al presidente Fox desde esta sección. Muy en resumen, lo que hace Weber es matizar el asunto de los sacrosantos principios. A México le conviene acceder a las irrazonables demandas del presidente de los Estados Unidos, George Bush, aunque éste no haya logrado aún demostrar de qué manera el Irak humillado en la Guerra del Golfo es todavía una amenaza para la seguridad de Washington. Nos conviene porque los vecinos del norte son nuestro principal socio comercial, la fuente de ingresos de millones de mexicanos que allá trabajan de manera ilegal y envían sus dólares a Zacatecas, a Oaxaca y a todo el país. Pero nos conviene a muy corto plazo. A mediano y largo plazo a nadie, y menos a México, le conviene un imperio mundial que dictamine quién pertenece o no a futuros "ejes del mal", porque un buen día el petróleo mexicano, el uranio o lo que sea podría ser imprescindible para "la seguridad de Estados Unidos" y ya tendrán permiso de "venir a por él", como dicen los españoles.

Más le conviene al mundo y a México una Unión Europea fuerte que, con Rusia, reinstale el equilibrio mundial perdido con la desaparición de la Unión Soviética. Y más todavía le conviene una Organización de las Naciones Unidas armada y poderosa que imponga la ley en Irak, en Israel y Palestina, en Pakistán e India, en Corea y donde quiera que un régimen ponga en peligro la paz o tenga al frente un genocida. Y para eso, las Naciones Unidas del futuro no pueden seguir dependiendo de las armas de Washington. Eso lo entendió pronto Israel y se puso a desarrollar las propias.

Rechazar los actuales términos de la guerra no es un asunto de principios, de ética absoluta, de respeto a nuestra política exterior. Es Realpolitik, es ver lo que nos conviene sin recurrir a principios eternos porque ninguno lo es. Recordemos el poema de Brecht que dice algo así como: "Una noche vinieron por los judíos y yo no hice nada, porque yo no era judío. Otra noche vinieron por los gitanos y yo no hice nada, etcétera... Esta noche vinieron por mí, y nadie hizo nada". Bush, o alguien peor que él, podrá tener el camino libre para dictaminar cuándo y por qué le es urgente invadir México. Claro que, si nos ponemos cínicos, hay una frase, cuyo autor no recuerdo, que dice: "No hay mejor negocio en el mundo que tener una guerra con los Estados Unidos... y perderla". Quien lo dude, vea California, Texas o Nuevo México e imagine a San Francisco y Los Ángeles si los mexicanos hubieran ganado en 1847.

Derrocar al tirano

El régimen de Husein debe ser desarmado y, de preferencia, derrocado. Pero no es necesario, para convencernos de eso, aceptar la comparación, en que han caído tantos comentaristas, entre Hitler y Husein. Resulta simplemente ridícula. Nos dicen que si las potencias hubieran detenido la carrera armamentista de Hitler durante los años 30 no habría habido guerra mundial en los 40. Así pues, con la misma lógica hay que parar a Husein. En lo último tienen razón: hay que impedir que Irak, y quien sea, acumule armas de exterminio masivo, incluidos los Estados Unidos, Inglaterra, Francia, Rusia, China, Corea, Pakistán, Israel y la India.

Sólo que no puede compararse la Alemania industrializada de 1939, productora de acero de alta calidad, de los mejores motores del mundo, aviones, tanques y submarinos, magníficas armas de fuego, óptica de gran precisión: un país derrotado, pero del primer mundo, con el Irak inventado al final de la Primera Guerra Mundial, formado por tribus, analfabeta, pobre, medieval, sin tecnología propia y, para colmo, derrotado en 1991 y con doce años de bloqueo. ¿Dónde está la cuenca del Ruhr irakí? ¿Quiénes son sus poderosos industriales, sus Krupp? ¿Dónde tiene oculto Husein al equivalente irakí del proletariado alemán, altamente calificado, disciplinado por la escuela desde la infancia, puntual, riguroso, metódico, estricto, rígido, depresivo, perfecto para la producción industrial?

Se debe acabar con el régimen de Husein porque es un peligro, pero debe hacerlo la autoridad mundial, la ONU, como debe enfrentar a otros criminales, uno de ellos Ariel Sharón, sin duda alguna.

El voto útil

El llamado que muchos hicimos al votar por Vicente Fox porque era el único que, según todas las encuestas, con un ligero empujón de prensa podría acabar con el régimen priista, el voto útil, como se le conoció, tan fue útil que hizo desaparecer al partido de Estado. Hoy el PRI es un partido como todos, sin las arcas de la nación abiertas al retozo, y una merecida multa por sus trapacerías.

Que los errores y anécdotas de Fox no nos hagan olvidar a López Portillo y a su cuatacho el Negro Durazo, el jefe de policía que impuso la corrupción en todos los niveles; a los muertos, torturados y desaparecidos en tiempos de Echeverría; al Ejército usado para robar urnas llenas de votos y cargarlas en camiones militares; la prepotencia de diputado, el caciquismo de gobernador; a Rubén Figueroa, vulgar, armado e insolente; a Margarita López Portillo imponiéndole a su hermano la primera visita del Papa, aunque ello costara al país la renuncia de un gran liberal: Jesús Reyes Heroles, de lo mejor que produjo el PRI. Mil veces los tropezones de Fox que la organización cardenista de la tierra, por la que tenemos un campo improductivo; o que las raterías, pillajes, asesinatos y humillaciones de "la dictadura perfecta".

 

la talacha fue realizada por: eltemibledani

0 animados a opinar:

 

 

ÍNDICE DEL BLOG

milenio diario

la crónica de hoy

la jornada

revistas

misceláneo

 

etiquetas:


pasaron por aquí


la plantilla de este blog es el "pizarrin" donde, durante sus ratos de ocio, eltemibledani hace sus pininos modificando el xhtml fuente.

páginas vistas

desquehacerados