La llamada "brecha de género" entre las habilidades de hombres y mujeres debe llenarse. Es curioso que solamente se aplique la idea a mejorar los resultados de muchachas en preparatoria y a ellos se los dé por casos perdidos. La brecha de marras es la siguiente: desde niños, hombres y mujeres resuelven de manera diferente algunos problemas. Un dibujo de una figura tridimensional que cambia de posición entre otras que parecen iguales y no lo son es mejor resuelto por varones. Una prueba de abundancia de léxico, calidad en sintaxis y riqueza gramatical tiene mejores resultados entre niñas.

En un mundo de puertas abiertas a la educación, los educadores están preocupados porque la población en las diversas carreras no sea una muestra de la población general: estudiando el thou art del inglés isabelino hay más mujeres que hombres y estos pocos muy viriles no son, y en física o matemáticas la mayoría son hombres. Conclusión socio-política: es que los estereotipos sexistas se han filtrado cual delgadas viborillas y hacen presa de nuestras jóvenes.

Un artículo de Science (perdón, pero está en Science) indica que "breves ejercicios de escritura pueden ayudar a las mujeres a mejorar su desempeño en las clases de física, elevar sus niveles académicos y reducir así las bien documentadas diferencias entre estudiantes varones y mujeres". La nota dice "between male and female students", pero me horroriza la tormenta si traduzco como dice el diccionario: "macho" y "hembra", con lo cual desviaré la atención de lo sustancial que es esto: A nadie le importa un carajo que los muchachos no dominen el thou art shakesperiano, pero el pobre desempeño de las muchachas en ecuaciones diferenciales debe tener una explicación social, tiene qué pues ya lo han dicho grandes mujeres como Simone de Beauvoir y la atarantada Margaret Mead que, por no hablar samoano, fue víctima de muy pesadas bromas que le jugaron sus informantas samoanas.

Los ejercicios para reafirmar los valores de las jóvenes en Colorado y California "sugieren que ejercicios de auto-afirmación podrían ayudar a cerrar la brecha de género", afirma la nota publicada este viernes. Dice Akira Miyake: Las mujeres probablemente salieron bien en sus cursos de ciencia en preparatoria, y están interesadas en ciencia y están altamente motivadas para desempeñarse bien. Pero el hecho es que, ya en la universidad encontramos una gran brecha de género, lo cual nos dice que algunos procesos psicológicos están afectando la ejecución de las mujeres en exámenes y cuán poderosas pueden ser esas influencias.

Así pues, el doctor Miyake y sus colegas pusieron a prueba 399 male and female college students en una clase de introducción a la física. Durante la primera y cuarta semanas de clase, los investigadores pidieron a estudiantes seleccionados al azar que escribieran acerca de valores importantes para su personalidad. Tenían 15 minutos para escribir de asuntos como amistad y familia. Un grupo control, también formado al azar, debió escribir acerca de los valores menos importantes y explicar por qué sí deberían ser importantes para otra gente.

Este ejercicio de autoafirmación ofreció un empujón medible en las mujeres, pero no en los hombres, tanto en sus exámenes como en una prueba nacional de conocimientos en física. Es lo que hacen las escuelas especiales para discapacitados. El grupo control obtuvo C y el animado B (con escala de A excelente).

¿Se enojarán mucho si digo que el prejuicio social está, precisamente, en pre-suponer que hombres y mujeres deban tener igual rendimiento en física y matemáticas? ¿Por qué las quieren llevar a física? ¿Por qué alentarlas con "tú puedes, tú puedes..."? Por un evidente pre-juicio masculino que la sociedad entera ha introyectado: porque es más valiosa la física que la sociología, medicina, psicología, letras y otras carreras que las jóvenes eligen sin que las empujen ni les echen goya, cachún, cachún... El prejuicio está allí, no en la brecha de género.

Ocurre porque los hombres clasifican como superior todo lo que hacen mejor: desde saltar con garrocha hasta algo tan inútil como jugar ajedrez o hallar las matemáticas por las que un agujero negro puede consumirse en miles de millones de años... ¿Qué? ¡Oh, Dios mío, ¡Hawking!, ¿qué vamos a hacer? Aprende uno más con una clase de la señora Zárate a quien, por cierto, conocí antes de que fuera famosa porque era vecina de una tía que la ayudaba a vender sus baterías de cocina.

Bueno, pues el investigador que lleva el nombre de Kurosawa concluye que "la situación es un poco más complicada (que escribir un ensayo de autoafirmación), y hay muchos factores que contribuyen a la brecha de género"... El parto de los montes.

Vean cómo nadie se interesa en cerrar la brecha de género entre los hombres y mujeres que se dedican a tocar el tololoche, la tuba o diseño de maquillaje. Y vaya que hay un big, big gap.

Maravillas y misterios de la física cuántica (Cal y Arena), ahora con índice temático.

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• 2005 abril 24 : Por qué las mujeres evitan carreras científicas.

la talacha fue realizada por: eltemibledani