Murió Martin Gardner

publicado el 30 de mayo de 2010 en «Milenio Diario»
columna: «se descubrió que...»

 

A los 95 años murió Martin Gardner, matemático, divulgador y filósofo de la ciencia, gran escéptico, feroz clarificador de supercherías estilo predicciones de Nostradamus y mayas, violados por extraterrestres, avistamientos de hombrecitos ojones y cabezones. Su columna Mathematical Games en Scientific American, que escribió durante 25 años, fue una de las más leídas. Al dejarla, le sucedió con brillantez Douglas Hofstadter con temas similares y un buen anagrama del título: Metamagical Themas, donde siguió el análisis de la obra del grabador Escher iniciado por Gardner.

La nota sobre el fallecimiento de Gardner el sábado 22 recuerda que "abrió los ojos del público general a la belleza y fascinación de las matemáticas e inspiró muchas personas a seguirlas como materia de trabajo en sus vidas". Diviértase haciendo el flexagón con una hoja de papel.

Gardner fue un hombre muy premiado y publicado, miembro de consejos editoriales y colaborador de publicaciones dirigidas a fomentar el gusto por la ciencia y la razón, como Skeptical Inquirer y Free Inquirer. Con el mago James Randi evidenció los trucos de "psíquicos" de fama mundial como Uri Geller y sus cucharas dobladas con la mente.

Fueron notables la prosa de Gardner, su humor sin insolencia, la claridad de sus datos y su vasta cultura que lo hicieron respetado y temido por los adictos a los fenómenos paranormales. En el número de marzo / abril del Skeptical Inquirer, dedicó un artículo a "Oprah Winfrey: Brillante (y crédula) milmillonaria", donde sostiene:

"Hay dos Oprah Winfrey. Una es la afro-americana que luchó contra increíbles desigualdades en pobreza abyecta hasta convertirse en la más rica y admirada mujer en EU. La otra es una atractiva, inteligente mujer con un corazón de oro, pero que tiene apenas un pálido conocimiento de la ciencia moderna. En su programa diario promueve como invitados frecuentes a hombres y mujeres que predican puntos de vista y opiniones que no tienen valor médico alguno y en unos pocos casos hasta pueden conducir a la muerte. Esta ingenua Winfrey es el tema de este artículo..." Y viene la bomba que soltó el semanario Newsweek sobre las estrambóticas curaciones de Oprah...

Algunos animadores de tv creen cumplir si invitan a investigadores médicos de prestigio a debatir con un señor que se curó con agua de Lourdes o de Tlacote. Por supuesto no asisten, y se declara vencedores a los farsantes. Cuando mi sobrino mayor vivía conmigo en Cuernavaca, y éramos ricos porque el PRD aún no hundía la Zona Rosa del DF, vendía "Agua del Jordán". Se iba con sus amigos israelíes a la salida de la catedral y alejado uno de otro vociferaban entre sí en hebreo: Ish li rak shtáim!!! Ein davar!!!, y así convencían a fieles: "Barados, barados, agua del Jordán..." Lo único cierto de la fe es que hace milagros, así que curaron a mucha gente con agua purificada (tenían conciencia). La franquicia se la quedó AMLO.

Por cierto, Randi ha dado una sorpresa reciente: ya de barba blanca, salió del clóset... Nunca es tarde.

Debo las notas sobre Randi y Gardner a Mario Méndez Acosta, otro escéptico.

Disculpa

Mencioné que en el equinoccio de primavera no cae ninguna energía cósmica que pueda uno ir a recoger a pirámides con deterioro de Teotihuacán. Un lector en línea comentó que esa ciudad está trazada según la salida del sol el día en que alcanza el cenit. Otro me regañó y me puso a leer libros de geometría solar para entender "cenit". Le respondí que para definirlo me bastaba una plomada: su continuación hacia arriba marca el cenit. Hasta allí estuve bien.

Pero luego añadí algo que me sé de memoria hace decenios: que en su recorrido aparente a lo largo del año, el sol alcanza el cenit en el solsticio de verano. Con mi ejemplo de una naranja cruzada por un lápiz e inclinada 23 grados respecto de un foco, era fácil ver que, al sur del trópico, ese día el sol ya rebasó el cenit hacia el norte y no cae a plomo, hay sombras. ¿Por qué estaba tan seguro que no lo volví a consultar?

Porque se lo leí a Carl Sagan. Habla del descubrimiento más genial de la antigüedad, la medida de la circunferencia terrestre por Eratóstenes hacia el 250 a.C., con un palo, su sombra y la maravillosa geometría de Euclides: "En el solsticio de verano, el día más largo del año, [...], al mediodía las sombras habían desaparecido..." Cosmos, Planeta, México, p. 14. Pero eso ocurría en Siena, hoy Asuán, sobre el Trópico de Cáncer: allí coinciden cenit y solsticio, es más: los puntos donde eso ocurre determinan la línea del Trópico. En México va de Mazatlán a Tampico. Más al sur las fechas se van separando según la latitud: una antes y otra después del solsticio, con máxima separación en el ecuador, donde el cenit ocurre con los equinoccios.

Mi nota trataba otro asunto: durante el equinoccio de primavera, que no siempre es el 21 de marzo, no hay nada de que cargarse, salvo de polvo y sudor, en pirámide ni sitio alguno.

 

la talacha fue realizada por: eltemibledani

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